Exclusivo Colombia ubicó la supuesta tumba que fue profanada en el cementerio Central de Envigado. El “robo” del cadáver de un “narco” ecuatoriano continúa siendo un misterio.
La bóveda 30 del pabellón 18 del cementerio Central de Envigado esconde una historia, hasta ahora, blindada por la iglesia y las autoridades.
En septiembre de 2023, una misteriosa historia rodeó a este campo santo, ubicado en el sur del Valle de Aburrá. Un cadáver desapareció de su sepulcro. Horas más tarde, Daniel Parada, director de Fiscalías de Antioquia entregó un balance preliminar a los medios de comunicación “actualmente estamos en fase de indagación, tiene unos importantes avances y continuamos en la misma línea con un fiscal adscrito a la unidad de vida”. Pero en su momento, el funcionario no reveló mayores detalles.
La primera versión, no confirmada por la iglesia, le apuntó a un supuesto robo. Un testigo de la zona relató que “pues parece que sí se lo robaron porque según se ve, mire todo lo que sacaron, hasta la sangre se veía, el olor no se lo aguanta uno.
Periodistas de varios noticieros llegaron hasta la casa cural de la parroquia principal del municipio, pero ninguno obtuvo una declaración oficial, luego hubo un intenso objetivo de indagar con más detalle en el cementerio, pero fue cerrado, al parecer, por el “protocolo” que ordena la iglesia cuando se reporta la profanación de una tumba.
Otro testigo, quien prefirió no revelar su identidad le contó a Exclusivo Colombia que, previo al supuesto robo del cadáver, hubo señales que alertaron a los administradores del sepulcro, pero que nunca hubo una notificación oficial a las autoridades y curiosamente, la reja que protege al cementerio tampoco fue violentada. Sin embargo, hasta ahora no se conoce con precisión ¿Qué pasó con el sepulturero durante el supuesto robo del cuerpo?
La historia causó conmoción internacional, tras revelarse la supuesta identidad del cadáver robado. Aunque la iglesia tampoco lo ha confirmado, se conoció preliminarmente que los restos serían de Junior Roldán, señalado por las autoridades de diferentes países como un narco ecuatoriano, con perfil de “comandante” de la banda las Águilas, uno de los brazos armados de la organización los “Choneros”.
Según los registros, el cuerpo de alias JR, apareció en Fredonia el 6 de mayo de este año. Roldán era reconocido en su país como el “Pablo Escobar” de Colombia, estaba vinculado en investigaciones por al menos 20 asesinatos y pagó una condena de 13 años.
Pese a la conmoción por el misterioso y supuesto robo de su cadáver, el caso se quedó en silencio y hasta ahora ninguna autoridad ha corroborado que se trate de él ni los motivos que habrían desatado el impactante hurto.
Este portal visitó el cementerio Central de Envigado y por indicaciones de una habitante de la zona, llegó hasta la tumba profanada, que está muy cerca del acceso principal. Según el relato, está pintada de blanco y sellada por el protocolo que usa la iglesia cuando se reporta el irrespeto a un cadáver.
Sin embargo, la verdad de este cadáver se esconde en el silencio y por ahora quedan muchos interrogantes: ¿Cuál sería el interés de robar el cadáver? ¿Si fue un robo? ¿Hay seguimientos de las cámaras del municipio? ¿Hay algún vehículo identificado? ¿A dónde lo trasladaron? ¿Cómo hizo el vehículo para evadir a las autoridades con el olor que se extendió una manzana a la redonda por estado de descomposición?